Muestra Frágilmente
Ambas trabajan las relaciones entre «naturaleza» y «cultura», cuestionan la «realidad» y analizan sus elementos constitutivos, valiéndose, en gran medida, de tácticas publicitarias.
Gladis Desumvila apunta más hacia lo «autóctono» y Marisa Gallo, en cambio, hacia lo «universal». Ambas intervienen, en esta obra, el paisaje exterior del Centro Cultural Parque de España de Rosario. Desumvila rescata el nido de hornero –pájaro nacional, cantado por eminentes poetas argentinos– de los hombros de una escultura de Lola Mora en el Monumento a la Bandera. Marisa Gallo –protagonista de una intensa actividad artística, aquí y en el exterior, como lo acredita su frondoso currículum– prefiere plantear un paisaje diferente. Una y otra emplean videos y obra gráfica variada en aras de una fabulosa instalación, en la cual insertan «banderas» de grandes dimensiones teñidas por colores entrañables que agitan las alas de una fantasía compleja, afectiva, que invita al público asistente a sumar sus propios matices.
El arte aparece aquí como un agente dialéctico, al principio y al fin de un proceso que abarca la «realidad». De la obra parten vínculos tras los cuales se abroquela, y que luego vuelven a ella. El arte observa, así, las paradojas de la interrelación.
Las artistas presentan la instalación como continua «inauguración» que posibilita una «auguración», constituyéndose en «oráculo» en su función de «carrefour». Es decir, no producen un sentido sino abren un abanico de reflejos, favoreciendo en cada espectador –»espectrador»– la captura de un instante único. Congelando la esencia de ese devenir, en sí, «corren el velo».
Lo paradójico del lazo es, de este modo, «frágilmente» denotado –denostado–. Se utilizan celadas –imágenes en dos dimensiones, luces que promueven artificios, cavidades virtuales– para presentar una serie de reflejos que ponen en cuestión la imagen.
Inauguración: Viernes 13, 20.30 hs. en el Patio de los Cipreses.